España es el país de la Unión Europea que más pesticidas utilizó en 2020, con 75.774 toneladas que provocan «graves» daños en la salud de las personas, de los ecosistemas y en la pérdida de biodiversidad, según “El Atlas de los pesticidas” presentado por Amigos de la Tierra, junto a la Fundación Heinrich-Böll-Stiftung de Alemania y la Red Europea contra los pesticidas.
El responsable de Soberanía Alimentaria de Amigos de la Tierra, Andrés Muñoz Rico, ha explicado que según el texto, el uso de estos químicos se ha incrementado un 80 % en todo el mundo desde 1990, con una utilización que en 2020 supuso en Europa 468.431 toneladas, en América Latina (770.393), en Asia (658.529), en América del Norte (486.732), en África (105.757), en América Central (90.163) y en Oceanía (70.421).
Reino Unido, el mayor exportador
Además, ha señalado que es un negocio con abundancia de mercados con altos márgenes siendo el Reino Unido el mayor exportador con 32.187 toneladas, seguido de Alemania con 8.078 y España con 5.182.
Brasil es el principal país receptor de pesticidas con 10.008 toneladas, seguido de Ucrania (6.003) y Sudáfrica (1.702).
Las ganancias de las divisiones de los pesticidas de las cuatro empresas más grandes de estas compañías químicas supusieron para Syngenta 9.900.000.000 dólares, Bayer (9.800.000.000), Corteva (5.700.000.000) y BASF (5.500.000.000).
Sustancias tóxicas más vendidas
Entre las sustancias tóxicas más vendidas están el glifosato «problablemente cancerígeno», según la OMS, de Bayer-Monsanto (841.000.000 dólares); tiametoxam, que está prohibido en la UE por su toxicidad para las abejas (242.000.000), glufosinato, con efectos adversos sobre las funciones sexuales y la fertilidad, según la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (227.000.000).
Según Muñoz Rico, los productos químicos tienen unos costes estimados para la salud de 132.000.000.000 euros en Europa, con un impacto en el sistema endocrino principalmente, pero además con impactos neurológicos, en la obesidad y la diabetes y trastornos reproductivos.
Y ha recordado que las concentraciones máximas permitidas en el agua de glifosato en Europa es de 0,1 microgramos por litro, mientras en Brasil está permitido 500 microgramos por litro.
Firma del tratado de libre comercio UE-Mercosur
Marta García Pallarés, coordinadora de la Campaña No a los Tratados de Comercio e Inversión de Ecologistas en Acción, ha explicado que esta situación se empeorará con la firma del tratado de libre comercio UE-Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay).
De hecho, ha subrayado, la «Comisión Europea y los gobiernos europeos lo venden como la mejor receta para la recuperación económico después de la pandemia», sin embargo, este tratado solo «incrementará la deforestación o la pérdida de biodiversidad, gracias a las políticas neoliberales».
Una vez más, ha dicho, «América Latina queda relegada a la exportación de materias primas y recursos para el fortalecimiento de los sectores industriales en la UE», y lo único que se conseguirá será «desequilibrios» sociales, ambientales y económicos.
Además, según la experta, se contempla la reducción del 90 % de aranceles en los pesticidas en el Mercosur, lo que significará «un aumento del uso de estos agroquímicos para incrementar la producción de soja, azúcar, maíz o arroz, o el de la carne de vacuno, que depende de la soja y de los pesticidas» y los «únicos beneficiarios serán las grandes productores de pesticidas».
