Un tribunal estadounidense ha condenado a los grupos alemanes Bayer y BASF a pagar 265 millones de dólares a un agricultor que denunció que su pesticida con dicamba había destruido sus cultivos de durazneros.
El jurado del tribunal federal de Cape Girardeau, en el estado de Misuri, ha dictado esa sentencia tras una denuncia de Bill Bader que afirmaba que ambas compañías animaban a los agricultores a usar el dicamba de forma irresponsable.
El dicamba es un pesticida popular, pero controvertido, ya que tiende a matar los cultivos en los campos vecinos de donde se utiliza. Se expande fácilmente y acaba con las plantas que no están adaptadas al producto. Según la agencia Bloomberg, este es el primer juicio en Estados Unidos sobre el pesticida dicamba, que lleva muchos años en el mercado. Agricultores de distintos lugares de Estados Unidos demandaron a Bayer por las pérdidas sufridas por culpa del dicamba.
Esta decisión judicial llega después de otro caso en el que Bayer fue condenada por un jurado californiano a pagar 290 millones de dólares a un jardinero enfermo de un cáncer incurable. Esa sentencia fue por no haber informado bastante de la peligrosidad del RoundUp, otro controvertido pesticida.
Bayer, que asegura que el dicamba es inocuo para los cultivos si los agricultores siguen las instrucciones, ha anunciado en un comunicado el lunes que tiene intención de apelar la sentencia «lo antes posible». BASF, por su parte, no ha querido comentar la decisión judicial.
Bayer compró en 2018 el gigante estadounidense de los cultivos transgénicos y las semillas Monsanto, y tuvo que ceder a BASF una parte de sus actividades agroquímicas para respetar las normas de la competencia.